Había llegado el momento de irme de
allí, volví a sentir miedo. Me levante de la silla dirigiéndome a
la puerta, Pedro me había dicho que lo espere unos segundos así que
eso hice. Minutos después a la altura de mi cintura, veo un par de
zapatillas, bastante lindas, pero no podía aceptarlas, con mi mano
las corrí, pero el no se quedo atrás y se arrodillo.
Pedro:Puedo?
Pau:Esto esta mal, no puedo aceptarlas
-dije mientras di unos pasos hacia atrás-
Pedro:Dejame que te las de, me sobran
zapatillas, sino después me las devolves -se corrió hacia delante,
con la intención de meter mis pies dentro de aquel par de
zapatillas-
Pau:No quiero que me tengas lastima.
-di exactamente tres pasos hacia atrás, pero no pude dar mas ya que
me había encontrado con la puerta de la entrada-
Pedro:No es lastima, no podes caminar
así -volvió a acercarse, levantando mi pie- permitime ponértelas.
Sin ninguna otra opción, Pedro me puso
las zapatillas y luego se paro, corrió un mechón de pelo que había
quedado tapando mi rostro.
Pedro:Queres que te acompañe? -había
notado mi inseguridad, mi miedo-
Pau:No quiero molestarte mas, debes
tener miles de cosas para hacer.
Pedro:Si tengo, pero no son mas
importantes que acompañarte -lo mire desentendida- no esta bueno que
camines por la calle insegura-
Pau:No puedo negarte mi miedo a que me
vuelva a pasar lo mismo o peor, pero puedo ir sola, creo que tengo la
edad suficiente para enfrentar mis miedos -le dije decidida-
Pedro:Esta bien -abrió la puerta y me
dejo pasar primero- te acompaño hasta la puerta de adelante, así de
paso, la cierro con llave.
Caminamos hacia la puerta, cada vez mas
cerca de la realidad que debía enfrentar, mis miedos aumentaban. Y
si ellos seguían afuera? Y si lograban hacer conmigo lo que querían?
Cerré mis ojos y al abrirlos ya estaba en la puerta, del lado de
afuera, en la vereda de aquella cuadra y Pedro en la puerta, este se
despidió de mi con un beso en mi mejilla y yo me quede mirándolo.
Pau:Es muy tarde para arrepentirme? -le
dije, mientras apareció una sonrisa en mi rostro que al darme cuenta
la borre-
Pedro:Ya lo sabia -piso la vereda y
cerro la puerta- para donde vamos?
Pau:Es para allá -señale la
dirección, pero luego me desoriente- creo.
Pedro:-rió al notar que no sabia donde
me encontraba- hagamos así, vamos al colegio y de ahí me decís
como ir. Hay que tomar un taxi.
Pau:Un taxi -negué con mi cabeza- no
tengo para pagarlo.
Pedro:Estas conmigo, yo lo pago, no te
preocupes.
Pau:No puedo, me diste un par de
zapatillas y ahora queres pagar un taxi por mi culpa, no es necesario
-me negué a recibir su ayuda- vamos caminando.
Pedro:Pero vamos a tardar bastante.
Pau:Vallamos en colectivo, capaz vos no
estas al nivel de ir en ese medio de transporte, pero yo puedo
pagarlo -saque unas monedas de mis bolsillos- aceptarías?
Pedro:Obvio, esta bueno experimentar
cosas nuevas, no? -sonreí al escucharlo-
Pau:Si, gracias -sentí la necesidad de
abrazarlo y así fue, al notarlo me separe de él con mi mirada baja-
perdón.
Pedro:No pidas perdón y gracias, por
que? -me dijo desentendido-
Pau:Por ayudarme, por entenderme, por
no tenerme lastima, soy una persona como vos, aunque seamos muy
distintos.
Pedro:Nunca dude de eso, vos sos muy
diferente a todos los que conozco, por dentro y por fuera, tu manera
de vestirte es única, siento que te pones lo que te gusta y no lo
que necesitas para quedar mal y por dentro.. sos muy buena persona.
Pau:Gracias, igual me viste una sola
vez con otra ropa que no sea mi uniforme, ahora -sonreí al decirlo-
bueno, vamos? Se esta haciendo tarde.
CONTINUARA
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